Adios 2007
Me hiciste regresar a casa en enero.
Me hiciste pasar un caluroso verano y me hiciste viajar.
Me hiciste conocer Bretagne, Lille y Paris; la tumba de Vallejo, Notre Dame y La Seine.
Me hiciste despertar de un sueño, camino a casa, al salir del aeropuerto.
Me hiciste reencontrar a mis amigos y despedir a otros.
Me hiciste aprender de mí mismo y mis pasiones.
Me has hecho reír, bailar, hacer música y agotar la voz.
Me has hecho darme cuenta que el tiempo pasa rápidamente.
Dos mil ocho: te espero con la misma intensidad, te abrazaré y me aprovecharé de tí con todas las fuerzas que tengo.
No te soltaré por 365 días.
...a tí tampoco, te lo prometo.