lunes, octubre 30, 2017

Sirenas

Y desperté con el sol. Parecía que fue ayer cuando rodeado de amigos dije: llegaré hasta el gran mar y hablaré con las sirenas. Entre sonrisas, loco me llamaron.

Y desperté con el sol. Disfruto de mis ríos y mis valles, pero el gran mar me espera. Las sirenas, aún quiero conocer. Inconforme, me llamaron.

Y desperté con el sol. Un viaje largo, pero el gran mar, se abre ante mí. La sirenas: encantadoras, las mejores del mundo. Confiado, me llamaron.

Y desperté con el sol, el mar sigue ahí. Diviso el agua turquesa y las playas blancas. Sirenas, ¿donde estáis? ¿Cuánto tiempo ha pasado? Solitario, alguien me llamó.

Y desperté con el sol. El regreso es duro. Casi no hay fuerzas. No sé si los amigos siguen ahí ¿Quien es ese que ahora se arrastra y casi no se reconoce? ... El de las cuestionables decisiones, me llamo yo.

Ilustración: The Land Baby (John Collier)

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me gustó tu poema. Un ritmo parecido a las olas del mar. Una melancolía con toque de spleen de Baudelaire
Una última estrofa que deja un sabor salado. Suena como una botella tirada al mar.
Yo diría que las decisiones son por su propia naturaleza cuestionables. Pero uno nunca está solo, los amigos no olvidan.